Muríó Chen Kai, tal vez el mago mexicano más relevante de los últimos cincuenta años. Para que su recuerdo, sus enseñanzas y su magia no se desvanezcan, Joaquín Kotkin. «El mago de la mediabarba», escribe su semblanza, en el nº 5 de Maese Coral, con el conocimiento de alguien que fue tan cercano y pudo apreciar sus gestos, sus secretos y prodigios con la proximidad de una lupa.

De su mano descubrimos sus comienzos, el origen maya de su nombre, sus primeras rutinas, su concepción de la magia, sus referentes y maestros, los años dorados de las grandes ilusiones y los programas de televisión, su contribución a la magia y y ese revolotear de palomas que nos evoca su nombre cada vez que un ilusionista hace aparecer una paloma empleando una de las técnicas que él inventó.

En honor de Chen Kai, este hermoso poema de Antonio Machado
.
¿Y ha de morir contigo el mundo mago
donde guarda el recuerdo
los hálitos más puros de la vida,
la blanca sombra del amor primero,
la voz que fue a tu corazón, la mano
que tú querías retener en sueños,
y todos los amores
que llegaron al alma, al hondo cielo?
¿Y ha de morir contigo el mundo tuyo,
la vieja vida en orden tuyo y nuevo?
¿Los yunques y crisoles de tu alma
trabajan para el polvo y para el viento
Antonio Machado
(Soledades, galerías y otros poemas, 1907)